Las dudas de Pedro..
Si, ya sé que voy a elucubrar sobre encuestas, y sé también que las encuestas solo muestran tendencias generales equivocadas (casi siempre). Pero, no olvidemos que, por regla general, las tendencias marcan en todo momento la estrategia electoral que toma cada partido, y precisamente, esa estrategia, ya sea acertada o no, es la que moviliza al elector o le hace quedarse tumbado en su sofá. De ahí, queramos o no, es de donde vienen los inapelables resultados en las urnas.
Si de algo parecen estar seguros todos los sondeos, estudios y análisis del panorama electoral, es de la victoria del PSOE. Ya tenemos un primer punto de partida.
El segundo punto de partida, es que los sesudos analistas, también parecen estar seguros de que Pedro Sánchez no alcanzará la mayoría absoluta, por consiguiente, si quiere gobernar tendrá que pactar.
Me puedo equivocar, lo sé. Y no solo espero, sino que deseo sinceramente equivocarme, pero aún así voy a desarrollar un par de teorías.
Las tendencias hablan de una bajada importante de Podemos y, eso representa un serio problema para la izquierda (y también para mí que estoy en Podemos). Tal como apuntan todos los sondeos, parece imposible que una alianza o pacto entre PSOE y Podemos vaya a alcanzar los 176 escaños necesarios para sustentar un gobierno estable. Esa situación, implicaría para el PSOE y Podemos, la necesidad de añadir a su pacto, que llamaremos “de izquierdas”, a un grupo de partidos relativamente variopinto: Compromís, JuntsxSi, ERC, PNV, En Marea, etc. para hacer frente al tripartito de derechas que sin duda alguna, intentará por todos los medios, buscar también sus acuerdos.
Los medios de comunicación, siempre “interesados” en crear una opinión favorable al actual inmovilismo austericida europeo, llevan semanas desgranando argumentos, que no son otros que los de los que mandan de verdad: los poderes financieros.
Si nos detenemos a analizar someramente los argumentos del auténtico Poder, razones hay: dicen que lo mejor para el PSOE es optar por pactar con UNA SOLA opción en lugar de hacerlo con un grupo tan variado como el que hizo ganar la moción de censura a Pedro Sánchez, que acabará (según esos medios), por ser “una jaula de grillos”. Por si faltaba algo, las claras peticiones de Pablo Iglesias de dirigir algún ministerio no son vistas como precisamente tranquilizadoras por los poderes económicos, así que su clara orientación y sugerencia queda bien definida: PSOE + C’s (si la suma de escaños da de si) es la solución ideal para que nada cambie. También es cierto que el apoyo de las formaciones catalanas y/o vascas no van a salir gratis al PSOE.
Los viejos del lugar recordamos, la larga historia de enredos y prebendas que se han concedido a PNV o CIU, cada vez que PSOE o PP les han pedido ayuda para gobernar desde Madrid. Por si faltan argumentos de peso, la actual crisis catalana y sus “presos políticos” permiten intuir que, cualquier apoyo va a ser no solamente costoso para el PSOE, sino que va a provocar además de encendidos debates, graves acusaciones, e infinidad de manipulaciones malintencionadas (de todo tipo) por parte de las derechas.
Quiero pensar que aún así, Pedro Sánchez optará por la opción más natural que consiste en NO sentarse a gobernar con Ciudadanos. Ayer, sin ir más lejos, Inés Arrimada ya dejaba claro que la intención post-electoral de su grupo, no era precisamente la de pactar con el PSOE, aunque lo que dicen los dirigentes de C’s me parece tan digno de confianza como las "presuntas" cualidades de: honestidad y decencia del comisario Villarejo.
Dicho todo esto, me preocupa y no poco, lo que pueda pasar en Valencia. Ximo Puig en un alarde de interesada estrategia, decidió unir su destino político al del PSOE estatal, porque pensó en las ventajas personales que podría obtener anticipando elecciones autonómicas en coincidencia con las estatales. Que nadie busque una eventual explicación a su decisión que no sea la de: Ximo pensó únicamente en su culo y en mantenerlo pegado al sillón de Molt Honorable President.
Lo que tal vez Ximo no pensó, es que jugando sus cartas a todo o nada, ponía en grave peligro algo que nos ha costado mucho conseguir a los valencianos: El pacte del Botanic.
Ya sé que algunos dirán que no hay que confundir, que cada ámbito territorial tiene sus propias reglas e interpretaciones, etc. Pero de algo debemos estar todos seguros: ni hay pactos sin intercambio de cromos, ni hay poder sin concesiones inconfesables. Puede que Pedro Sánchez decida (Espero que NO) pactar con C’s la siguiente legislatura, ya que Rivera es el delfín que los euro-austericidas pusieron en España para que nos llevara por la recta senda del desastre urdido por Davos, FMI, BCE y depredadores varios. La gran Banca, poco propensa al despilfarro, se gastó millones en promocionar esa opción veleta que tuvieron a bien llamar: “el Podemos de derechas”, y como es de esperar con la Banca, piensa "rentabilizar su inversión".
Pero, no debemos caer nunca en la trampa de la ingenuidad. Si por azares del destino electoral, C’s pacta y acaba apoyando a Sánchez para que ocupe la Moncloa, puede que se saque de la manga alguna carta oculta, poniendo como condición a su apoyo, la extensión nacional del pacto, y eso se cargaría las esperanzas de los valencianos.
Si yo estuviera en el lugar de Rivera, y empapado de la obra "El Príncipe" de Nicolás Maquiavelo, no lo dudaría ni un instante. Aunque por suerte, ni soy Albert Rivera, ni milito en Ciudadanos, ni aplico las enseñanzas de Maquiavelo. Al fin y al cabo, solo soy un mediocre sin aspiraciones, que tiene la suerte de no desear poder alguno, ahorrandome así, el tener que bajar a la apestosa cloaca de la política española. Prefiero ser el anodino ciudadano que duerme a gusto todas las noches, y pasa olímpicamente de desayunarse a diario con esos sapos que tanto desean otros... Pues que les aproveche...